La pelea por el campeonato de la Liga Premier de Inglaterra, entre el Manchester City y el Arsenal, está muy cerrada, donde la ventaja es sólo de un punto entre ellos; por lo que no se pueden dar el lujo de dejar puntos en el camino.
Pep Guardiola, quien es el entrenador de Manchester City, vive estos momentos de tensión al máximo:
El sábado, el Manchester City ganaba fácilmente 2-0 ante el Leeds; tanto así que al minuto 84 tuvieron la oportunidad de hacer el tercer gol al marcarles un penal a su favor.
Erling Haaland, quien es tirador oficial de penal del equipo y actual goleador de la liga, cedió el cobro de la “pena máxima” a Ilkay Gundogan, quien había marcado los 2 goles, para que logrará su “hat trick”; desobedeciendo la instrucción de su entrenador, de que cobre el penal.
Gundogan falló el cobro de la pena máxima y Pep Guardiola, estalló furiosamente contra… Erling Haaland.
Minutos más tarde, Leeds anotó un gol para ponerse 2-1, pero finalmente el Manchester City logró la victoria.
Al terminar el partido, Pep declaró:
"Si Gundogan anota, todos están ”OK, hat-trick, bien hecho”. Pero un tirador es un tirador. Con 2-0, esto es un negocio, no una situación que no podamos olvidar".
Se requiere tener una mente fría para liderar una organización. Datos, hechos, reglas, etc. son necesarios para buscar una decisión acertada.
Despedir a alguien, renunciar a una “situación agradable”, el cortar caminos, son acciones difíciles de acatar pero pueden poner en riesgo los resultados de la organización. Es cierto, no son agradables, pero por ello, un buen líder asume su responsabilidad; a pesar de lo que piensen los demás. Claro, debe tener sus fundamentos.
¿Qué habrán pensado Haaland y sus compañeros de su entrenador? En pleno juego, nunca pensaron en las consecuencias futuras. Es allí, donde el líder, tiene que comunicar al grupo el objetivo que se busca lograr con la decisión tomada de una manera clara y transparente.
Es cierto, el Manchester City iba arriba en el marcador fácilmente, pero es allí donde más cuidado se debe tener. Entrar a una zona de confort y de relax, permite que se flexibilicen las normas. ¡Cuidado, no te puedes relajar!
Si tu hubieras sido el entrenador del Manchester City, ¿te hubieras tocado el corazón para que Gundogan logre su “hat trick”? Cuando eres líder, te toca ser el héroe o villano en las decisiones. No siempre todos te van a entender. Mientras existan los fundamentos, toma la decisión en pro de la organización, ¡no tengas miedo!